Afrontar un embarazo en solitario

La
formación de una familia ha cambiado en la
sociedad. El encontrar familias monoparentales ya es un hecho gracias al avance de las leyes. Sin embargo, el ser
madre soltera, todavía tiene algo de especial, pues la naturaleza de la sociedad es muy fuerte en aceptar las ideas mayoritariamente.
El enfrentarse a un embarazo en solitario, necesita de mucha fuerza emotiva, ya que compartirlo en pareja es mucho más aliviador.
Una mujer sola, recibe la doble carga que le puede aliviar su pareja, con ello, no quiere decir que seamos machistas, pues en cuestión de pareja, también hemos llegado a avanzar en padres o madres de un mismo sexo. En esto nos referimos a afrontar las funciones domésticas, de educación, económicas
estas son una realidad a la que se ha de enfrentar la pareja y en este caso, la madre en solitario.
En la llegada de un niño, el tiempo libre queda ocupado en todos los aspectos, el tiempo se vuelve demasiado justo y la vida personal se limita al bebé, además de la social. Con todo esto, las relaciones se alejan y se siente soledad y en parte abandono, el cual, en algunas personas no es así, pero el cambio de vida lo hace sentir.
El no tener pareja, hace a la mujer autosuficiente, incluso sobradas de perfeccionismo. Ellas solas son capaces de mostrar que pueden solas y lo cierto es que un niño lleva demasiado trabajo para afrontarlo en solitario. Esto se complica en mamás demasiados jóvenes que no reciben demasiada ayuda.